Para aventurarnos en la exportación, es indispensable que la empresa esté en condiciones de competir en los mercados, es decir cuente con capacidad de producción, técnica, gestión y financiera suficiente para asumir los compromisos en los mercados internacionales.

Por lo tanto, toda empresa que desee incursionar en los mercados externos debe realizar un análisis interno de sus fortalezas, debilidades, y externos de las oportunidades y amenazas para enfrentar el mercado nacional e internacional.

Igual de importante es realizar un estudio de mercado para seleccionar el mercado objetivo. El empresario o emprendedor debe analizar una serie de factores, tanto cualitativos como cuantitativos, con el objetivo de evaluar la conveniencia de invertir esfuerzos y recursos para ingresar su producto en ese mercado o mercados.

Una vez analizado el mercado hacia el cual tiene previsto expandir sus actividades, la empresa debe analizar sus propias capacidades para abordar los mercados externos. Solo a partir de ambos análisis, el plan de exportación puede orientarse a determinar las ventajas competitivas de la empresa y las oportunidades que se le ofrecen en el exterior.

El exportador debe considerar que su producto no siempre se ajusta a las exigencias de los consumidores extranjeros y, por ende, a veces es necesario adaptar el producto a las exigencias externas.


Ahora ya tenemos decidido el mercado y hemos adaptado el producto si corresponde. Para tales efectos, considere los siguientes factores como costos fijos y variables, márgenes, términos Incoterms, límites de precios inferior y superior.

Teniendo claros los puntos anteriores, debemos iniciar con la promoción de nuestro producto para lograr contactos, esto puede llevarse a cabo a través de una feria, misión comercial o a través de la compra de listados de potenciales importadores del país elegido.

Una vez contacto un posible comprador se acordara todos los términos de la venta, relacionados a la forma y plazo de pago, cantidad y precio de la mercadería, plazos de entrega, etc., se dará curso a la emisión de una factura pro forma, que contiene todos los datos arriba mencionados, como así también el plazo de validez de la oferta, y esta pro forma deberá ser aceptada por el importador.

Luego, que el importa acepte nuestra cotización y se formaliza un contrato de compraventa, se procede a la elaboración y acondicionamiento del producto, documentación y las formalidades aduaneras para su envió al cliente.

Por lo tanto, para emprender y exportar hay que quererlo, formarse para ello y tener la capacidad suficiente como organización.

Si requieres información sobre cómo iniciarte en la actividad exportadora, consulta a través del siguiente formulario online. También puedes comunicarte escribiéndome a martinmondragon@outlook.com con asunto asesoria de exportación.

Post a Comment