El destino económico de Latinoamérica y de cada país en lo individual dependerá de la forma en que aproveche sus fortalezas.
¿Cuál será el verdadero impacto del Covid-19 en la economía de Latinoamérica? ¿Cuáles son las oportunidades que tenemos como región para superar la inevitable crisis económica?
Hace meses, nadie se hubiese imaginado que un diminuto micro organismo de la naturaleza (un virus) sería capaz de colapsar al mundo y a las economías más desarrolladas y poderosas del planeta.
Sin ánimos de alenta el pesimismo, todo indica que, Latinoamérica será una de las regiones más lastimadas por esta pandemia en términos de crecimiento económico.
Según datos del Banco Interamericano de Desarrollo (BID), las exportaciones de América Latina mantenían una tendencia contractiva desde los primeros meses de 2020, momento en el cual, ni siquiera se contemplaba la posibilidad de sufrir los devastadores efectos económicos de una pandemia.
Los países de Sudamérica observan las caídas más pronunciadas, mientras que en Centroamérica y México las ventas externas aún mantienen tasas positivas de expansión en el primer bimestre del año, previo a la irrupción de la pandemia en Estados Unidos, su principal mercado, asegura el Banco Interamericano de Desarrollo BID. Pero este escenario está próximo a cambiar, sin lugar a dudas.
La desaceleración económica global, la parálisis de las cadenas de suministro, la caída de los precios de las materias primas, la inestabilidad de los precios del petróleo, el evidente endurecimiento de las condiciones de financiamiento y el inexistente plan de rescate y apoyo económico hacia el sector empresarial por parte de la gran mayoría de los países latinoamericanos, vaticinan un escenario poco alentador para nuestra región.
Sin embargo, no todo es negativo. La crisis sanitaria derivada de la propagación mundial del COVID-19 ha acelerado el obligado proceso de transformación digital que tanto necesitaba la región. Un proceso que durante años ha caminado a pasos lentos en los países en vías de desarrollo a causa del escepticismo, la burocracia y la falta de inversión en este sector. Provocando una brecha tecnológica importante en comparación con otras regiones del mundo, como Asia y Europa.
Si algo está claro, es que la verdadera transformación digital, está aquí y ahora (nunca ates en la historia se había visto una cantidad tan impresionante de empresas y personas trabajando al mismo tiempo de manera remota a nivel global). Es por ello, este es el momento histórico y el escenario ideal para hacer uso de la tecnología, como la alternativa y el recurso más factible con el que se cuenta a corto plazo para reactivar la economía y el flujo comercial de Latinoamérica.
El sector digital y su transformación, si es bien gestionada (de manera inteligente responsable y sostenible), traerá grandes beneficios para la región y abrirá nuevas ventanas de negocio para productos y sectores aún no explorados en este rubro, como lo es el auge de los mercados a domicilio, los kits de menús y comidas para preparar en casa, las plataformas digitales de enlace comercial B2B, la educación a distancia, entre mucho otros.
Finalmente pero no menos importante, debemos recordar que Latinoamérica es la huerta que alimenta al mundo. La actual crisis sanitaria ha provocado el aumento en la demanda de productos con propiedades y beneficio inmunológico como la quinoa, la kombucha y el romero. Productos de procedencia latinoamericana que han aumentado su demanda hasta en un 100% durante el último mes según cifras del Banco Interamericano de Desarrollo (BID).
De las 445,6 millones de hectáreas de tierra potencialmente adecuada para una expansión sostenible de áreas de cultivo. El 28% se encuentran en Latinoamérica. 50% de las exportaciones de productos como el plátano, el aguacate, la piña, la soya y el azúcar provienen de nuestra región. Así como el 25% de las exportación global de productos como el café, la carne bovina, el pollo y el maíz.
Según datos del Banco Interamericano de Desarrollo (BID), se prevé que para 2028 un cuarto de las exportaciones totales agrícolas mundiales serán procedentes de nuestra región. Lo cual posiciona nuestra región como un jugador clave y necesario en este sector y nos muestra un abanico inigualable de oportunidades.
Sin duda, son momentos difíciles para el sector comercial, los mercados financieros y las economías en todo el mundo. Como resultado de la crisis del coronavirus COVID-19, el año 2020 muy posiblemente va a ser de crecimiento cero a nivel global. Sin embargo, considero que el destino de económico de la región y de cada país en lo individual dependerá de la forma en que aproveche sus fortalezas y haga frente a sus debilidades.
La crisis del coronavirus, como otras, pasará, y lo que va a dejar a su paso es una larga de lista de aprendizajes y de oportunidades para la región. ¡Seamos positivos, resilientes y aprovechemos este momento histórico!
“En las crisis es donde se encuentran las mejores oportunidades
Mi nombre es Darinel Herrera y te invito a seguir esta sección redactada especialmente para ti.
Fuente utilizadas:
Gracias Daniel, desde Panamá. Estamos lanzando nuestra plataforma de ecommerce local y trasnacional, tecnológicamente creadas hace años pero sin poder lanzarlas hasta ahora que ha llegado el momento de reducir esa brecha tecnológica que mencionas. Hay otra gran brecha, la operativa logística local, muy desarrollada en Europa y todavía inexistente en Panamá y para la exportación concentrada la actividad logística en pocos agentes, con necesidad de crecer en eficiencia tecnológica, competitividad de precios para alcanzar mercados. Muchas Gracias!
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