Arabia Saudita y los Emiratos Árabes Unidos (EAU) son cultural, política y socialmente diferentes en muchos aspectos
Muchos asumen que los dos países árabes del Golfo son similares.
Sin embargo, Arabia Saudita y los Emiratos Árabes Unidos (EAU) son cultural, política y socialmente diferentes en muchos aspectos.
¿Cómo?
Bueno, exploremos tres diferencias clave entre ellos.
1. Estructuras de poder centralizadas en lugar de federales
Arabia Saudita está bajo el gobierno autocrático del Rey de la Casa de Saud. El Rey actual ha nombrado a su hijo, Muhammad Bin Salman (también conocido como MBS), Príncipe Heredero de Arabia Saudita.
Aunque oficialmente no es el Rey, ejerce el poder del Rey y controla todas las funciones económicas, sociales y políticas del país.
Los EAU, por otro lado, son parte de una federación de siete estados, todos los cuales tienen su propio gobernante o 'Emir' (de ahí el Emir en los Emiratos).
Es una monarquía federal, presidencial y constitucional, que se ha establecido gracias a la cooperación mutua de los emiratos individuales. Sin embargo, al igual que Arabia Saudita, es antidemocrático ya que todas las decisiones sobre los roles principales (como el presidente y el primer ministro) las toma el Consejo Supremo Federal. Los emiratíes no tienen voz en sus líderes.
Aunque los emires dentro de los EAU son monarcas absolutos (según el poder establecido en Arabia Saudita), los emiratíes destacados se incluyen en las reuniones regulares del consejo para discutir eventos locales y federales, lo que significa que los EAU generalmente se consideran menos autocráticos que Arabia Saudita.
2. Monocultural versus multicultural
Arabia Saudita es un país culturalmente homogéneo que toma muchas de sus tradiciones y costumbres de sus creencias profundamente arraigadas en el Islam y su herencia beduina.
Los Emiratos Árabes Unidos, sin embargo, es uno de los países más multiculturales del mundo. En contraste con la homogeneidad cultural de Arabia Saudita, solo el 15% de la población de los EAU son emiratíes nativos. El otro 85% son expatriados de todo el mundo (el 20% de este grupo de expatriados proviene de la India).
La composición multicultural de los EAU se debe en gran medida a su dependencia de la mano de obra expatriada para mantener sus industrias nacionales de petróleo, petroquímica, cemento y aluminio.
Las "zonas libres de impuestos" de los Emiratos Árabes Unidos han atraído una cartera diversa de negocios de servicios internacionales exitosos que naturalmente atraen a empleados expatriados, y el país (particularmente Dubái) es un destino de vacaciones por excelencia en el Golfo.
3. Tolerancia religiosa cero versus flexible
La creación de Arabia Saudita se debió en gran parte a un pacto entre un fundamentalista islámico ultraconservador del siglo XVIII llamado Muhammad ibn Abd al Wahhab y un líder local, Muhammad bin Saud. Al ofrecer obediencia política a Muhammad al Saud, Muhammad al Wahhab, a su vez, recibió la protección garantizada de su movimiento religioso.
Hasta el día de hoy, Arabia Saudita sigue esta misma interpretación puritana del Islam que permite poca tolerancia de cualquier otra religión (o cualquier otra interpretación del Islam). Esto significa que no hay iglesias, sinagogas ni templos en Arabia Saudí y, aunque se toleran los libros religiosos para uso personal, regalar una biblia a un ciudadano saudí podría interpretarse como proselitismo, lo que conlleva una sanción severa.
Los Emiratos Árabes Unidos, por otro lado, son generalmente muy tolerantes con otras religiones. Las personas pueden practicar su fe abiertamente y usar ropa religiosa y otras prendas. Los Emiratos Árabes Unidos (particularmente Dubái) también alberga algunas iglesias y templos hermosos y la primera sinagoga se construyó en 2019. Aunque, al igual que Arabia Saudita, cualquier persona atrapada tratando de hacer proselitismo y convertir a los ciudadanos de los Emiratos Árabes Unidos estaría sujeta a castigo.
COMMENTS