¿Qué diferencias existen entre internacionalización y exportación?

¿Qué diferencias existen entre internacionalización y exportación? Descubre en este post la diferencia entre internacionalizar y exportar

Cuando hablamos de salir al exterior, es habitual escuchar sobre estos dos términos “Internacionalización” y “Exportación”. Si bien a veces se utilizan como si fueran sinónimos, lo cierto es que existen diferencias importantes entre ambos.

Por esta razón, en este artículo explicaremos cada uno de estos términos, entendiendo qué es la exportación, qué es la internacionalización y cuáles son las principales diferencias entre uno y otro término.

Principales diferencias entre internacionalización y exportación

La exportación

En términos simples, la exportación se refiere a la venta de productos o servicios a clientes en otros países, es decir, ventas que se llevan a cabo fuera del mercado nacional. Estas transacciones pueden ser regulares o convertirse en operaciones regulares, dependiendo de la demanda y del éxito que tenga tu producto o servicio en el mercado extranjero.

Un aspecto clave de la exportación es su flexibilidad. Al no requerir una presencia física permanente en el país de destino, la inversión inicial suele ser menor que en la internacionalización.

Puedes comenzar vendiendo a través de distribuidores locales o canales de venta online, lo que te permite llegar a un público amplio sin necesidad de establecer una infraestructura costosa.

Esta flexibilidad te da la posibilidad de probar diferentes mercados y modelos de negocio antes de comprometerte con una inversión más grande.

Sin embargo, es importante tener en cuenta que la exportación también tiene sus desafíos. Al no tener control directo sobre la distribución y la venta de tu producto, debes asegurarte de elegir socios confiables y competentes. Además, es posible que tengas que adaptarte a las regulaciones y requisitos específicos de cada mercado extranjero.

No obstante, el proceso de exportación, si se lleva a cabo de forma correcta, suele reportar resultados económicos inmediatos a la empresa. Se trata, por tanto, de una estrategia muy rentable en el corto y medio plazo.

A modo de reflexión, EXPORTAR es como mojar la punta del pie en la piscina: no necesitas establecer una presencia física permanente en el mercado extranjero, sino que puedes vender a través de distribuidores o canales de venta online.

La internacionalización

La internacionalización es un proceso más complejo, largo y costoso, que va más allá de vender productos a otros países a través de terceros. Durante el proceso de internacionalización, una empresa busca asentarse en otro territorio, introduciendo su marca en el mercado. Se trata, por tanto, de implantarse comercialmente en otro país, lo que requiere de un estudio y análisis previo muy minucioso.

A la hora de internacionalizarse, una empresa debe evaluar aspectos culturales, políticos, sociales, legales y económicos del país en el que quiera empezar a desarrollar su actividad. La internacionalización empresarial, además, lleva consigo, en muchas ocasiones, la participación directa de la empresa en el territorio, siendo necesaria la apertura de puntos de venta y oficinas, entre otras cosas.

Todo este proceso de internacionalización, al ser largo y costoso, tiene un enfoque mucho más prolongado en el tiempo, por lo que está orientado a obtener resultados en el medio y largo plazo.

A modo reflexión, La internacionalización es como sumergirse por completo en la piscina: te comprometes a entender las necesidades y preferencias de los consumidores en ese país, y a establecer una presencia más sólida.

¿Cuáles son las principales diferencias entre exportar e internacionalizar?

Como hemos visto, el proceso de internacionalización requiere de una mayor implicación por parte de la empresa, ya que supone la implantación de un negocio y/o marca en un territorio extranjero. Esto requiere de evaluar, analizar y conocer bien el mercado antes de empezar a realizar la actividad económica en dicho país.

La exportación, por otro lado, es un proceso más sencillo que puede ser independiente a la internacionalización. De hecho, muchas empresas comienzan exportando a un determinado país y, con el paso del tiempo y el conocimiento del territorio y sus posibilidades, deciden internacionalizarse en ese lugar con el fin de obtener un mayor rendimiento económico.

Si bien ambas estrategias buscan expandir tu negocio a nuevos mercados, existen diferencias importantes que debes considerar:

Característica	Exportación	Internacionalización
Enfoque	Corto plazo	Largo plazo
Adaptación	Mínima	Alta
Inversión	Baja	Alta
Riesgo	Moderado	Alto
Presencia en el mercado	Puntuación	Duradera
Objetivo	Ventas puntuales	Crecimiento y valor a largo plazo

¿Exportar o Internacionalizar? ¿Cuál estrategia elegir?

La decisión entre exportar o internacionalizar dependerá de diversos factores, como el tamaño de la empresa, la experiencia en mercados extranjeros, los recursos disponibles y los objetivos a largo plazo.

Exportación: Es una buena opción para empresas que comienzan a incursionar en mercados extranjeros y que buscan obtener ganancias rápidas con un riesgo moderado.

Internacionalización: Se recomienda para empresas que buscan establecer una presencia sólida en un mercado extranjero, adaptarse a las necesidades locales y construir una marca global. Requiere mayor inversión y tiempo, pero ofrece potenciales de crecimiento más altos.

Exportar puede ser un paso previo a la internacionalización. Muchas empresas comienzan exportando a un país y, con el tiempo y el conocimiento del mercado, deciden internacionalizarse para obtener un mayor rendimiento económico.

Es importante evaluar cuidadosamente ambas opciones y elegir la estrategia que mejor se adapte a la realidad de cada empresa. Recuerda que el éxito no tiene una fórmula única. La clave reside en tener objetivos claros, realizar una investigación de mercado profunda y contar con un plan estratégico bien definido.