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Cuando reservas un envío, esperas que todo salga según lo planeado. Sin embargo, los retrasos en los envíos son una realidad frecuente en el comercio internacional, afectando tanto a pequeñas empresas como a grandes corporaciones. Aunque las navieras y proveedores logísticos hacen su mayor esfuerzo para garantizar entregas puntuales, existen múltiples factores que pueden provocar demoras en el transporte marítimo o terrestre.

Causas de retrasos en envíos internacionales

A continuación, exploramos las 9 principales razones por las que se retrasan los envíos internacionales, así como algunas recomendaciones clave para minimizar su impacto en tu negocio.

1. Eventos extraordinarios y factores externos imprevistos

Uno de los motivos más difíciles de controlar son los llamados eventos de “fuerza mayor”, que incluyen desastres naturales, conflictos geopolíticos, piratería, incendios y otros acontecimientos fuera del control humano. Fenómenos como huracanes, ciclones o tormentas severas pueden tener un gran impacto sobre la logística internacional.

Un ejemplo icónico fue el bloqueo del Canal de Suez en 2021. Aproximadamente el 12% del comercio mundial pasa por esta ruta, y el incidente paralizó las operaciones globales durante una semana, con consecuencias que se prolongaron durante meses.

Consejo logístico: Realiza una planificación de la cadena de suministro con escenarios alternativos y considera seguros adicionales para cubrir posibles interrupciones.

2. Cambios en los horarios y congestión del tráfico

Los cambios de horarios en los itinerarios de los buques y la congestión en rutas terrestres también son motivos frecuentes de retrasos en envíos internacionales. Esto se agudiza durante temporadas pico como el Año Nuevo Chino o la Navidad, cuando las fábricas cierran temporalmente y las empresas enfrentan una gran acumulación de carga.

Esta alta demanda genera embotellamientos portuarios, escasez de equipos y demoras en la carga y descarga de contenedores.

Consejo logístico: Agrega días extra en tus cronogramas durante temporadas altas y considera rutas logísticas alternativas.

3. Problemas en aduanas

Los errores en la documentación aduanera pueden generar retrasos importantes en los envíos internacionales. Ya sea por formularios incompletos, errores de declaración o inspecciones aleatorias, el despacho aduanero puede ser una etapa crítica si no se maneja correctamente.

Consejo logístico: Asegúrate de contar con todos los documentos necesarios para exportación y apóyate en servicios de despacho aduanero profesional para evitar errores.

4. Falta de claridad sobre responsabilidades logísticas

En cada envío intervienen distintas partes y es crucial saber quién hace qué y cuándo. La falta de comunicación entre exportadores, transitarios y clientes puede provocar retrasos innecesarios por tareas no cumplidas a tiempo.

Consejo logístico: Coordina de forma precisa cada paso del proceso logístico y utiliza plataformas digitales de seguimiento de envíos para monitorear hitos y fechas límite.

5. Tecnología obsoleta o ineficiente

En un mundo altamente digitalizado, contar con un proveedor logístico que utilice tecnología obsoleta puede representar un serio problema. La gestión manual de cargas, el uso de llamadas o correos para reservar espacios o la falta de trazabilidad aumentan las probabilidades de error.

Consejo logístico: Opta por operadores logísticos que ofrezcan servicios digitales, seguimiento en tiempo real y plataformas de reservas automatizadas.

6. Congestión portuaria o huelgas en puertos

Cuando hay un exceso de contenedores en los puertos, ya sea por alta demanda o por conflictos laborales como huelgas portuarias, los plazos de entrega se ven seriamente afectados. Un ejemplo  es la pandemia de COVID-19, que provocó cierres temporales de puertos clave, afectando millones de toneladas de mercancías.

Consejo logístico: Revisa con frecuencia el estado de los puertos de origen y destino y mantén contacto estrecho con tu proveedor logístico internacional para anticiparte a posibles bloqueos.

7. Retrasos en la producción del proveedor

Muchas veces los retrasos no comienzan en el transporte, sino en la fabricación del producto. Si tu proveedor no finaliza a tiempo la producción, tu envío se verá automáticamente afectado, especialmente si no se previó un margen de seguridad.

Consejo logístico: Siempre incluye un colchón de tiempo en tus cronogramas y exige actualizaciones constantes del estado de producción.

8. Cargas “roladas” (rolled shipments)

Una carga rolada es aquella que no logra ser cargada en el barco asignado y debe esperar al siguiente viaje. Esto sucede cuando la capacidad del transportista disminuye, hay sobrecupo o si falta documentación crítica.

Consejo logístico: Trabaja con empresas que ofrezcan priorización de carga y espacio garantizado, especialmente si manejas mercancía sensible al tiempo de entrega.

9. Daños durante el transporte

Aunque es menos frecuente, el daño a la mercancía en tránsito puede causar retrasos si hay que revisar, embalar nuevamente o volver a enviar el producto. Esto puede deberse a mal manejo, condiciones climáticas extremas o accidentes logísticos.

Consejo logístico: Considera contratar seguros logísticos como Value Protect, que amplían la cobertura ante incidentes como incendios, robos o fenómenos naturales.

Prepararse es la mejor estrategia

En el mundo del comercio exterior, comprender las principales causas de los retrasos en envíos es el primer paso para reducir sus efectos. Aunque algunos factores no pueden evitarse, una buena planificación, documentación adecuada, comunicación clara y tecnología eficiente son aliados clave para mantener tu cadena de suministro internacional en movimiento.

Si gestionas exportaciones o importaciones regularmente, asegúrate de aliarte con un proveedor logístico confiable, actualizado tecnológicamente y con experiencia global. Esto no solo reducirá riesgos, sino que también optimizará los tiempos de entrega, mejorará la satisfacción de tus clientes y protegerá tu reputación comercial.

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