Arabia Saudí es el principal exportador mundial de petróleo y sus derivados, y el 88% de sus exportaciones son de petróleo y sus derivados.
Tras conocer un crecimiento de 3,6% en 2013, debido a una menor producción de petróleo, se prevé una consolidación del crecimiento en 2014, gracias a una política fiscal expansionista, inversiones más fuertes y los ingresos del petróleo. Por otro lado, aunque cuenta con una importante industria petroquímica, su tejido productivo todavía está en fase de desarrollo.
Arabia Saudí es el principal exportador mundial de petróleo y sus derivados, y el 88% de sus exportaciones son de petróleo y sus derivados.
Economía
La economía saudí es la mayor entre los países del Consejo de Cooperación del Golfo. Según los datos obtenidos del Fondo Monetario Internacional (FMI), el producto bruto interno (PBI) de Arabia Saudita en 2013 ha crecido un 3,7% respecto a 2012. En 2013 la cifra del PBI fue de US$ 745 billones, con lo que Arabia Saudita es la economía número 20 en el ranking de los 189 países según los datos obtenidos.
Por otra parte, las previsiones tanto para este año 2014 como para 2013 se acercan al 4%. No obstante, dada la fuerte dependencia de la economía del país del sector petrolero, estas previsiones pueden registrar fuertes variaciones en función de los precios internacionales del crudo.
Por lo mencionado, el país saudí busca activamente atraer inversión extranjera directa (IED) en diferentes sectores como el gas, las telecomunicaciones, las tecnologías de la información, la electricidad, el tratamiento de aguas, la industria petroquímica, los servicios relacionados con el sector minero y los ferrocarriles.
Inversión extranjera
La Ley de Inversiones Extranjeras del país (No. M/1 del 5/4/1421, según el calendario musulmán) establece tres principios básicos: igualdad de condiciones para el capital nacional y extranjero; libertad de repatriación de capitales, de beneficios y de dividendos; y libertad de transferencia de acciones entre socios extranjeros.
Además, permite constituir joint venture, estrategia muy utilizada para implantarse en el mercado saudí por lo útil que resulta contar con un socio local en este mercado.
No se cobra impuestos indirectos y aranceles sobre para los productos importados que serán utilizados en los procesos de producción registrados en la Saudi Arabian General Investment Authority (SAGIA).
No obstante, hay que tener en cuenta que existen sectores en los que la inversión no está permitida o está restringida, como prensa, publicidad, industria militar, inversiones inmobiliarias en La Meca y Medina, servicios de comunicación audiovisual, contratación de personal, organización de peregrinaciones a La Meca, empresas de investigación y seguridad, fabricación de explosivos para uso civil, etc.
Recientemente se ha autorizado la inversión en distribución comercial, pero solo para aquellas inversiones que superen los siete millones de euros y con un límite del 49% de participación extranjera. También se han autorizado en telecomunicaciones, seguros, y transporte aéreo y ferroviario de pasajeros.
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