Iniciar un nuevo negocio pidiendo un préstamo rápido

Iniciar un nuevo negocio pidiendo un préstamo rápido a través de una entidad bancaria o mediante un prestamista online

La mayoría de los que han terminado sus estudios y no encuentran empleo en su área optan por darse de alta como autónomos para iniciarse en su actividad laboral. Según un estudio de la Confederación Nacional de Autónomos y Microempresas (CONAE), muchas de las personas que forman parte de este colectivo comenzaron a realizarse en su profesión de esta forma porque “deseaban hacer uso de sus conocimientos y capacidades”. Montar un negocio es una de las mejores maneras de dar salida a los altos niveles de estudios que algunos jóvenes tienen, pero no siempre es una opción asequible puesto que requiere desembolsar una gran cantidad de dinero inicial que no tiene garantías de retorno. 

En estos casos, la mejor ayuda es solicitar un préstamo, algo que se puede hacer de dos maneras: a través de una entidad bancaria o mediante un prestamista online. El primer modo es más lento que el segundo y además, menos sencillo, es decir, suele imponer mayor número de condiciones y supone más papeleo. El segundo método es bastante rápido y cómodo, ya que las plataformas virtuales para solicitar préstamos online u otras similares que realizan este tipo de actividad suelen estar disponibles las 24 horas, sin limitación horaria. De tal manera, podemos terminar todos los trámites para solicitar un préstamo desde un ordenador, sin necesidad de desplazamientos ni intermediarios, a través de unos sencillos pasos.

En primer lugar, indicaremos la cantidad de dinero deseada y el plazo de devolución de ésta. Después rellenaremos un formulario con nuestros datos personales y estaremos a tan sólo unos minutos de conseguir nuestro préstamo. Sin embargo, hay que tener en cuenta varias cuestiones: por un lado, los tipos de interés que se aplican al crédito, que pueden ser fijos (que nos brindan la seguridad de pagar siempre la misma cantidad) o variables (que se irán modificando en función del indicador al que vayan vinculados); por otro, debemos fijarnos en las comisiones, ya sean de apertura, de cambio de condiciones, de cancelación anticipada u otras, puesto que en muchas ocasiones pueden encarecer nuestra financiación y eso supondrá que sea más difícil amortizarla. Para decidirnos entre una y otra web debemos comparar las características de cada una de ellas para saber cuál de todas se adapta mejor a nuestras posibilidades económicas.

Este tipo de portales web ofrece ayuda a muchas personas, pero sobre todo a aquellas que tienen dificultades económicas (sin nómina, sin aval o que se encuentren incluidos en una lista de morosos). Aunque esto suponga una gran ventaja para los usuarios, antes de solicitar cierta cantidad de dinero, debemos tener en cuenta nuestras cuestiones personales, a saber, la estabilidad laboral o el nivel de endeudamiento que se tiene hasta dicho momento. 

Por último, en el momento de confirmar la petición de nuestro crédito deberemos leer las condiciones que ofrece la prestamista, asegurándonos de entender todos y cada uno de los puntos. En caso de tener alguna duda o pregunta, cada plataforma incluye un número de atención al cliente con el que podremos comunicar en cualquier momento. 

Gracias a este sencillo proceso, podremos dar el gran salto hacia el mundo laboral, construyendo desde los cimientos un negocio próspero que nos lleve a la cima del éxito.