Recomendaciones al contratar un agente de aduana

El Agente de Aduanas es una persona natural o jurídica autorizada por la Autoridad Aduanera del país para realizar el despacho aduanero, que consiste en una serie de trámites ante la Aduana para lograr el desaduanamiento de las mercancías con los documentos comerciales o de embarque, en representación de una empresa importadora o exportadora.

En la actualidad muchas de las Agencias de Aduanas brindan una atención integral al importador y exportador, en distintos aspectos vinculados con el comercio internacional y mantienen sucursales en las principales ciudades del país.

Las empresas de este tipo ofrecen un servicio integral que se encarga de las aduanas, pero también del almacenaje, las cargas y descargas y el transporte, lo que simplifica bastante la planificación de una operación de importación y exportación.

Además del ahorro de tiempo y la facilidad que supone el centralizar todas estas contrataciones con una sola empresa, generalmente el precio que ofrecen por todos los servicios suele ser también muy competitivo.

Contratar a un agente de aduanas es relativamente fácil, pero encontrar a uno bueno puede resultar un poco más complicado. En las primeras operaciones, cuando una empresa se plantea importar o exportar, facilita bastante el proceso el conocer qué debe tenerse en cuenta.

Se recomienda las siguientes prácticas para la selección y posterior contratación de los servicios de un agente de aduana:

Comparar: tarifas, calidad, opiniones. Invertir tiempo en informarse siempre es positivo. Además de buscar un agente de aduana competitivo en precio, es necesario que aporte la experiencia necesaria y que se trate de profesionales de calidad. Merece la pena buscar agentes de aduana que gocen del reconocimiento en el sector e incluso, puede ser una ventaja el contar con uno que ofrezca facilidades de pago.

Priorizar la rapidez: un retraso provocado por una deficiente tramitación aduanera puede suponer un costo adicional importante en una operación, la pérdida de un cliente o mala imagen. No puede correrse el riesgo y, por ello, hay que primar la agilidad en la selección del agente aduanero.

Buscar la eficacia: que se traduce en reducción de costos de almacén, prevención de demoras y, en definitiva, encontrar al equipo profesional capaz de hallar soluciones a cualquier circunstancia que pueda acontecer.