En comercio exterior, cada detalle cuenta. Hoy, con los aranceles y disputas comerciales en primer plano, definir correctamente el país de origen de los productos se ha convertido en un asunto decisivo para los importadores. No es solo un requisito en la aduana: determina el pago de impuestos, el acceso a beneficios de los tratados de libre comercio y hasta la reputación de una empresa frente a sus clientes.
La razón es simple. Junto con el código del Sistema Armonizado y el valor declarado de la mercancía, el país de origen define el tratamiento que recibirá un producto en la frontera. Un error en este aspecto puede significar pagar más aranceles, perder beneficios o enfrentar sanciones.
Por qué importa el país de origen
El país de origen indica dónde fue fabricado un producto o, en algunos casos, dónde sufrió una transformación que lo convirtió en un bien nuevo. Con este dato, las aduanas deciden:
- Qué impuestos aplicar.
- Si el producto califica para reducciones arancelarias bajo un TLC.
- Si está sujeto a restricciones o sanciones comerciales.
- Qué información debe mostrar al consumidor.
En pocas palabras: el país de origen tiene un impacto directo en el costo final de la importación y en la competitividad de la empresa.
Las reglas de origen
Las reglas de origen son los criterios legales que establecen cómo identificar correctamente el país de origen de una mercancía. Existen dos grandes categorías:
1. Reglas no preferenciales
Aplican cuando no hay un acuerdo comercial específico. Se usan para aplicar aranceles generales, medidas de defensa comercial (antidumping, salvaguardias) y estadísticas de comercio.
2. Reglas preferenciales
Se aplican en el marco de los tratados de libre comercio. Permiten acceder a reducciones o eliminación de aranceles si el producto cumple con los requisitos establecidos.
Según la OMC, estas reglas se han vuelto más complejas debido a la globalización y las cadenas de valor fragmentadas: un solo producto puede tener insumos de cinco o más países distintos.
El concepto de transformación sustancial
Uno de los conceptos en la determinación del origen es la transformación sustancial. Se refiere al proceso mediante el cual los materiales o componentes importados de distintos países se convierten en un nuevo producto con características esenciales diferentes.
Ejemplos de transformación sustancial
Sí hay transformación sustancial:
Azúcar de un país, harina de otro y productos lácteos de un tercero son procesados en un quinto país para elaborar galletas. El resultado es un nuevo producto con clasificación distinta y, por tanto, con origen en el país fabricante de las galletas.
No hay transformación sustancial:
Verduras frescas de diferentes países se mezclan y congelan en otro país. No hay un cambio esencial, por lo que el origen debe declararse por cada ingrediente.
Procesos que no califican:
Reempaques, diluciones con agua o cambios menores que no alteran la naturaleza del producto.
Este criterio de transformación es clave cuando no hay un tratado aplicable.
El código del Sistema Armonizado y su relación con el origen
El Sistema Armonizado de Designación y Codificación de Mercancías (SA) es el documento sobre la cual se clasifican los productos en el comercio internacional. Cada producto recibe un código del Sistema Armonizado (HS code) que define su categoría aduanera.
Este código no solo sirve para calcular aranceles, sino también para aplicar las reglas de origen. Por ejemplo:
- En un cambio de clasificación arancelaria, un producto debe pasar de un código a otro distinto después de la transformación para considerarse originario de un país.
- Si los insumos mantienen el mismo código, es más difícil justificar un cambio de origen.
En la práctica, el HS code actúa como “puente” entre la clasificación del producto y la definición de origen en los TLC.
País de origen y tratados de libre comercio
Los tratados de libre comercio (TLC) introducen reglas más específicas para definir el origen de un producto.
Requisitos especificos de origen (REO)
Entre los métodos más comunes destacan:
1. Cambio de clasificación arancelaria (Tariff Shift)
Un producto debe cambiar de posición en el código del Sistema Armonizado tras su elaboración.
2. Contenido regional (Regional Value Content, RVC)
Se exige que un porcentaje mínimo del valor del producto provenga de los países firmantes del TLC.
3. Procesos específicos
Algunos bienes requieren procesos productivos concretos (ejemplo: textiles o químicos).
4. Reglas combinadas
Un TLC puede exigir una mezcla de los métodos anteriores, dependiendo de la naturaleza del producto.
Riesgos de no cumplir con las reglas de origen
Los importadores que no verifican cuidadosamente el origen de sus productos enfrentan varios riesgos:
- Perder beneficios arancelarios.
- Sufrir multas y sanciones.
- Retrasos en la liberación de mercancías.
- Daños a la reputación empresarial.
Un informe de la US Customs and Border Protection (CBP) destaca que incluso pequeños errores en certificados de origen pueden tener consecuencias millonarias para importadores.
En definitiva, el país de origen ya no es solo una etiqueta en el empaque.
